sábado, 24 de mayo de 2014

La moda de campo

La geología de campo es una amante caprichosa y voluble y lo que uno creía que iba a necesitar antes de empezar la carrera no tiene nada que ver con lo que te pide cuando te ves metido en ella. Digamos que he aprendido muchos trucos a lo largo de estos años de patear senderos (si es que los había) , medir en un equilibrio precario, subir y bajar para volver a subir, quemarme la nuca, dejarme las rodillas y las palmas de las manos en pizarras inclementes y maldecir mucho. 
  • Ropa
Yo soy fiel al estilo cebolla sobre todo porqué por mucho que mires predicciones el campo es el campo y también hace lo que le da la real gana, vamos que lo mismo estás sudando la gota gorda y de pronto te cae una tromba. 
Así que para invierno camiseta interior o una buena térmica , las que venden en decathlon de Kipsta o Wed'ze están bien y no son muy caras. Encima una camiseta normal, un forro polar y el abrigo o chubasquero según la estación y ya está, ¡las posibilidades son infinitas! 
También se aplica al tronco inferior, calcetines largos (ALGODÓN SIEMPRE ALGODÓN) y gordos sobre todo si vais a pisar nieve, además yo he llegado a llevar unas mallas y encima el pantalón. Estos últimos, son un mundo aparte, los pantalones de campo que venden suelen ser carísimos incluso en decathlon, y más si vas buscando algo impermeable. Siempre se puede ir a outlets o al rastro a buscar tallas sueltas en ropa de caza o militar para abaratar precios, OJO, esto sólo vale si eres un hombre o si eres mujer y no te importa tener un montón de tela sobrante entre las piernas.
En verano ni se os ocurra pensar que los pantalones cortos son buena idea, salvo que vayas a dar un paseito inocente, pero la mayoría de las veces vas a tener que atravesar zarzas y condenados juniperus oxycedrus además de la cantidad de bichos que pueblan las tierras del Señor y que muerden, pican, arañan y sobre todo dan mucha grimilla. 
Pero lo más importante para mí son las botas, sin un buen calzado te puedes machacar a corto plazo porque no tengan un buen agarre y te vayas rodando por una escombrera y a largo plazo porque no te sujeten el tobillo y te acaben causando lesiones. Sumemos rozaduras, uñas que se caen, pies mojados, etc... 
Hay infinidad de marcas, y como casi siempre el problema para el geólogo novato es que son terriblemente caras. Las botas Quechua de decathlon (juro que no me pagan por hacerles publicidad, es sólo que es lo más asequible y por lo tanto lo que más conozco) me suelen durar unos dos años con un uso casi diario y sin darles muchos cuidados. 
También tengo unas zapatillas de trekking de marca Salomon con Gore-tex y todo el percal, muy chulas y muy cómodas, pero no me sujetan el tobillo así que las uso sólo para paseos veraniegos de placer. 
  • Mochila 
Es mucho más que un instrumento, es una compañera con la que tendréis que convivir durante mucho tiempo así que antes de comprar una mochila deberíais leer este artículo: como ponerse una mochila.
Ojala lo hubiese encontrado antes de primero, yo me compré una mochila de Quechua de 25L (para variar) y no me fije mucho en la forma ni las sujeciones ni si tenían mochilas para mujer. Sólo me la probé vacía, un gran error. Ahora vuelvo de la mayoría de las salidas con dolor de espalda porque me cuesta mucho ajustármela correctamente. No es cuestión de apretar las cuerdas hasta que no te corra la sangre de los brazos ni de llevarla a la altura del muslo si no más bien de que el peso caiga donde deba y que esté bien distribuído. 
Las mochilas son indispensables sobre todo si hay que hacer largos desplazamientos a pie, si sólo tengo que trabajar en un afloramiento relativamente pequeño prefiero dejarla abandonada debajo de un arbusto, a la sombrita para que no se me caliente el agua, y llevar una riñonera de estas que tienen un bolsillo grande con el cuaderno, los lápices y todo lo que necesite. 

Dejaremos para otras entradas el material de geólogo tipo martillo, brújula, lupa y un largo etcétera porque hay mucho que contar y comparar.